La ministra de Asuntos Exteriores de Islandia y presidenta del Comité de Ministros, Thórdís Kolbrún Reykfjörd Gylfadóttir, el presidente de la Asamblea Parlamentaria, Tiny Kox, la secretaria general, Marija Pejčinović Burić, la comisaria de derechos humanos, Dunja Mijatović, y el presidente del Congreso de Autoridades Locales y Regionales, Leendert Verbeek, han realizado la siguiente declaración:
“Hace un año, la Federación de Rusia lanzó un ataque militar injustificado y sin provocación previa contra Ucrania, en flagrante violación del derecho internacional, incluido el Estatuto del Consejo de Europa. Al entrar la guerra de agresión en su segundo año, condenamos en los términos más enérgicos posibles la persistente agresión de Rusia y reiteramos nuestro inquebrantable apoyo a Ucrania y a su independencia, su soberanía y su integridad territorial dentro de sus fronteras reconocidas internacionalmente.
Condenamos la decisión de la Federación de Rusia de no atender los múltiples llamamientos al cese de las hostilidades y a la retirada de sus tropas, y que, por el contrario, las haya intensificado movilizando y desplegando fuerzas adicionales, y la anexión ilegal de territorios ocupados en Ucrania. Mientras los oficiales rusos han recurrido repetidamente a la retórica beligerante, los ataques contra infraestructura crítica y civil han continuado de forma deliberada e indiscriminada.
Una vez más, instamos a la Federación de Rusia a que detenga inmediatamente su agresión y retire sus fuerzas de ocupación del territorio de Ucrania. Seguimos decididos a apoyar a nuestro Estado miembro, Ucrania, a su gobierno y nos solidarizamos con el valiente pueblo ucraniano.
La agresión brutal y sin sentido se ha cobrado innumerables vidas humanas y ha causado un inmenso sufrimiento humano en Ucrania, el resultado son atrocidades y destrucción con un alcance que no se había visto en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial. Se han cometido graves violaciones del derecho internacional humanitario y de los derechos humanos. Reiteramos el imperativo de garantizar la rendición de cuentas de todos los crímenes, incluido el crimen de agresión. Si no se hace justicia no puede haber paz duradera.
También condenamos las denunciadas deportaciones y traslados forzosos e ilegales de ciudadanos ucranianos, incluido niños, a Rusia y a los territorios ucranianos temporalmente ocupados por Rusia. La Federación de Rusia debe poner fin a estos actos ilegales y debe permitir inmediatamente el regreso seguro de todos los ucranianos, especialmente los niños.
El Consejo de Europa está prestando su apoyo a Ucrania en materia de rendición de cuentas y resiliencia y está dispuesto a jugar un papel en la coordinación con otros mecanismos internacionales para lograr un sistema eficaz y completo de rendición de cuentas e indemnizaciones que impida la impunidad y proteja los derechos de las víctimas.
Aunque la agresión de Rusia contra Ucrania ha causado graves daños al multilateralismo, creemos firmemente que éste sigue siendo crucial para garantizar la paz, la seguridad y la prosperidad. Por lo tanto, pedimos a nuestros Estados miembros que, mientras se preparan para la próxima cuarta cumbre de jefes de Estado y de Gobierno que se celebrará en Reikiavik el 16 y 17 de mayo, demuestren unidad y continúen adoptando acciones decisivas y colectivas para apoyar a Ucrania.
Pedimos que se restaure la paz basada en el derecho internacional, la rendición de cuentas, la justicia y el respeto de los derechos humanos”.