La Mesa del Congreso de Poderes Locales y Regionales del Consejo de Europa ha adoptado la siguiente declaración:
"La Mesa del Congreso hace un llamamiento al gobierno de Georgia para que respete plenamente las normas europeas en materia de derechos humanos, democracia y Estado de Derecho, allanando el camino para la repetición de elecciones libres y justas a nivel nacional y local y el trato justo de todos los georgianos, incluidos los representantes elegidos en el ámbito local.
"Tras la visita al país del presidente del Congreso, los vicepresidentes 1º y 2º y el secretario general (3-4 de febrero), y basándose en declaraciones anteriores, la Mesa tiene claro que las autoridades georgianas deben empezar por tomar medidas inmediatas para hacer frente a la extrema polarización política y social que está perjudicando a su país. Deben garantizar la independencia de los organismos encargados de hacer cumplir la ley, del poder judicial y de todas las instituciones públicas. Se ha destituido a funcionarios públicos de ámbito local y nacional por motivos políticos. Esta práctica debe parar.
"Del mismo modo, debe permitirse a todo el mundo ejercer sus derechos democráticos a la libertad de expresión y a la libertad de reunión y asociación. La protesta pacífica forma parte integrante de las sociedades democráticas. Por tanto, las personas detenidas actualmente por su participación no violenta en protestas contra el gobierno deben ser puestas en libertad. Esto incluye a políticos y periodistas nacionales y locales como Mzia Amaglobeli, sobre quien el Congreso expresa su preocupación en particular.
"Al adoptar este enfoque, el gobierno georgiano debe cambiar su postura y dejar claro su compromiso con un diálogo genuino, abierto y constructivo con la oposición. Esta vuelta a las normas y estándares democráticos debería garantizar la confianza necesaria para que la oposición se comprometa con el gobierno y ponga fin a su boicot de las instituciones. A su vez, esto debería allanar el camino para la celebración de nuevas elecciones nacionales, basadas en las normas europeas y en las recomendaciones formuladas por los observadores internacionales, especialmente tras las elecciones celebradas en octubre de 2024, y facilitar también el avance hacia unas elecciones locales libres y justas. En este sentido, las autoridades georgianas deberían cooperar con la Comisión de Venecia en el dictamen solicitado por el Congreso sobre las últimas enmiendas al Código Electoral. Las próximas elecciones locales están previstas para octubre de este año. Celebrarlas en las condiciones actuales plantea el riesgo de agravar la situación. Por lo tanto, sin un cambio sustancial en el entorno político, dichas elecciones deberían posponerse.
"La Mesa cree en un futuro democrático y europeo que sirva a los intereses de todos los georgianos. Esto requiere la participación de todos los actores políticos, en todos los niveles de gobierno, incluidos el partido gobernante y la oposición y la sociedad civil, para reanudar el diálogo.
"El Congreso está dispuesto a prestar todo el apoyo posible para lograr ese fin. Habrá un debate sobre Georgia durante la próxima sesión del Congreso, que se celebrará del 25 al 27 de marzo de 2025".
