La 14ª edición de la Conferencia Octopus (2023) ha concluido en Bucarest (Rumanía). Cada vez son más los países que se adhieren al Convenio de Budapest del Consejo de Europa. Actualmente hay 69 Estados parte de todo el mundo, siendo Brasil, Nigeria y Camerún los últimos en adherirse, con otros 23 Estados que se han comprometido a hacerlo y un número récord de más de 130 países que hasta ahora han adaptado su legislación a las disposiciones del Convenio.
El secretario general adjunto del Consejo de Europa, Bjørn Berge, y el secretario de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía, Traian Hristea, han intervenido en una sesión especial centrada en los diez años de creación de capacidad de la Oficina del Programa sobre Ciberdelincuencia del Consejo de Europa (C-PROC).
En la jornada de clausura de la conferencia, el secretario general adjunto, Bjørn Berge, ha puesto de relieve que «la ciberdelincuencia afecta a los valores fundamentales y las instituciones de nuestras sociedades democráticas: desde la interferencia en las elecciones hasta los ataques contra infraestructuras críticas. Tenemos que mantenernos al día o incluso ir por delante de los acontecimientos, ya que las nuevas tecnologías se desarrollan a una velocidad impresionante. Todos ustedes juntos —presentes hoy aquí— son esenciales para lograrlo».
El acto, de tres días de duración (del 13 al 15 de diciembre), ha sido una de las mayores plataformas de intercambio en este campo y ha reunido a más de 500 expertos en ciberdelincuencia de 100 países distintos, procedentes de organizaciones internacionales, el sector privado y el mundo académico. Han debatido sobre la legislación, el intercambio de información y las diversas formas de explotación y abuso en línea, centrándose en la seguridad y el intercambio de pruebas electrónicas y en las enseñanzas extraídas en los 10 años de la Oficina del Programa sobre Ciberdelincuencia del Consejo de Europa (C-PROC).
Si bien el Convenio sobre la Ciberdelincuencia comprende una lista limitada de delitos, su eficacia se ve reforzada por las sinergias con tratados como el Convenio de Lanzarote para la Protección de los Niños contra la Explotación y el Abuso Sexual, el Convenio de Estambul sobre la Violencia contra la Mujer y la Violencia Doméstica o el Convenio sobre la Lucha contra la Trata de Seres Humanos del Consejo de Europa. La prevención de la delincuencia, la protección de las víctimas/testigos y la lucha contra la ciberviolencia son otros ámbitos en los que pueden darse respuestas conjuntas.
Al margen de la conferencia, el secretario general adjunto también ha mantenido reuniones bilaterales con el honorable ministro Mircea Abrudean, jefe de la Secretaría General del Gobierno rumano; James Kimuyu, director de Ciberdelincuencia del Ministerio del Interior de Kenia; el senador Constantin-Bogdan Matei, presidente de la Comisión de Juventud y Deportes del Senado rumano; y Traian Hristea, secretario de Estado del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rumanía. La Conferencia Octopus forma parte del Proyecto Octopus, financiado actualmente con contribuciones voluntarias de Canadá, Hungría, Islandia, Italia, Japón, Países Bajos, Reino Unido y Estados Unidos.
Discurso del secretario general adjunto