«Celebro con satisfacción la firma del presidente de la República Francesa, Emmanuel Macron, del nuevo contrato trienal «Estrasburgo, capital europea» (2024-2026), sede del Consejo de Europa y de numerosas instituciones europeas.
Esta firma corrobora un apoyo firme al Consejo de Europa, y en concreto a tres proyectos de derechos humanos destinados a afrontar el retroceso democrático actual. Me refiero al Observatorio de la enseñanza de la Historia en Europa, cuya misión se centra en fomentar y reforzar la comprensión de la cultura democrática a través de una enseñanza de la historia de calidad; del simulacro de negociación del Consejo de Europa (CoEMoN), un evento destinado a sensibilizar a los estudiantes de ciencias políticas sobre el papel, el funcionamiento y las distintas misiones de nuestra Organización; y, por último, del Foro Mundial para la Democracia, que se celebra en noviembre y constituye una oportunidad única para debatir los desafíos que enfrentan nuestras democracias».