La secretaria general del Consejo de Europa, Marija Pejčinović Burić, ha formulado hoy la siguiente declaración: «Estoy profundamente preocupada por los acontecimientos que se están produciendo en Georgia y lamento que el Parlamento haya aprobado en segunda lectura el proyecto de ley "sobre la transparencia de la influencia extranjera", a pesar de los llamamientos de los socios internacionales de Georgia para que lo retire. Dada la grave preocupación que suscita su compatibilidad con las normas europeas sobre democracia y derechos humanos, pido a los legisladores georgianos que esperen al próximo dictamen de la Comisión de Venecia y estudien sus recomendaciones antes de tomar ninguna decisión definitiva.
»Un entorno propicio para la sociedad civil y los medios de comunicación es esencial para una democracia vibrante y plenamente operativa. La transparencia no debe utilizarse como instrumento para estigmatizar a las organizaciones de la sociedad civil y limitar su capacidad de actuar libremente.
»También condeno la violencia presenciada en las calles de Tiflis en los últimos días. El uso desproporcionado de la fuerza contra los manifestantes es incompatible con las normas de derechos humanos. Los georgianos, que han demostrado en numerosas ocasiones su profundo apego a la democracia, deben poder ejercer pacíficamente sus libertades de reunión y expresión.
»Espero que Georgia y el Consejo de Europa prosigan el diálogo constructivo que ha caracterizado nuestra productiva cooperación en los últimos años. Seguimos dispuestos a ayudar a Georgia a garantizar el respeto de las normas internacionales en su camino hacia la integración en la UE.»