La APCE ha declarado que, basada en las evidencias que han aportado al ponente las autoridades ucranianas y neerlandesas, considera “la hipótesis más convincente hasta el momento” que el vuelo MH17 fuera derribado sobre Ucrania en 2014 por un misil Buk puesto a disposición de unidades militares controladas por la Federación de Rusia.
La resolución de hoy, aprobada por unanimidad, está basada en un informe de Titus Corlatean (Rumanía, SOC), y dice que la Asamblea está consternada por la “desinformación” propagada por las autoridades rusas en lo que respecta al derribo del vuelo de Malaysia Airlines, que ha causado “dolor y sufrimiento” a los familiares y amigos de las víctimas”.
“En lugar de proporcionar información fiable a los órganos de investigación competentes, las autoridades rusas difundieron desinformación, incluso versiones contradictorias sucesivas de los hechos diseñadas para crear confusión. Tal y como ha demostrado la inteligencia open-source publicada en diversos informes, las autoridades rusas llegaron hasta el punto de manipular datos de radares y satélites para ocultar la verdad”, dice.
En particular, han sido “completamente desmentidas” las versiones según las cuales un avión de combate SU 25 ó MiG 29 ucraniano habría derribado el vuelo MH 17, o que un misil Buk ucraniano habría disparado desde el territorio controlado por el Gobierno.
La Asamblea ha vuelto a instar a Rusia a cooperar de buena fe en las investigaciones en curso, proporcionando datos de radar e imágenes de satélite auténticos relativas al derribo, y a que se disculpe formalmente con los familiares de las víctimas del MH 17 por el dolor y el sufrimiento que esta desinformación ha causado.
También anima al Tribunal Europeo de Derechos Humanos a que considere conceder prioridad a las demandas de los familiares de las víctimas, “en vista de [su] intenso y continuo sufrimiento”.
Para acabar, los parlamentarios animan a las autoridades de seguridad aérea nacionales e internacionales a que actualicen sus procedimientos para volar sobre zonas de conflicto, a la luz de las recomendaciones de la Junta de Seguridad de los Países Bajos.